Este plato puede ser un aperitivo, tapa o entrante, y los mejillones tigre son típicos de Santiago de Compostela de Galicia aunque se consume en toda España, también hay otra versión de mejillones tigres rabiosos que próximamente espero atreverme a preparar, más que nada porque estos sí que pican de verdad.
Los mejillones tigre son unos mejillones rellenos que no dejan de ser un tipo de croqueta pero servida de manera más original y que se puede comer con cuchara.
El nombre de tigre viene porque se le añade un poquito de picante pero si no os gusta podéis prescindir.
Otra idea menos calórica para la receta es en lugar de acabar friendo los mejillones es hornear durante aprox. unos 5 minutos en el horno a 200º
También antes de freír, cuando los tengamos empanados, podéis congelar para utilizar cuando los necesitemos.
Ingredientes para una tapa:
- ½ kg de mejillones Gallegos
- 1 cucharada de mantequilla
- Aceite de oliva
- 1 cucharada de harina
- 1 vaso de leche
- ½ vaso de caldo de cocer los mejillones
- 120 gramos de gambas peladas
- Pan rallado
- 1 huevo
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- ½ cayena molida
- Nuez moscada
- Sal
Limpiar los mejillones con agua fría y poner en una olla, añadir un poco de agua y poner a cocer hasta que se abran bien. Reservar ½ vaso de caldo de la cocción.
Sacar los mejillones y guardar las cascaras.
Pelar las gambas y sofreír un poco en la sartén.
Picar los mejillones y las gambas.
En una sartén grande pochar la cebolla cortada en brunoise añadiendo una cucharada de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva.
Incorporar la harina y remover.
Añadir la leche removiendo, y como quedará un poco espesa la salsa añadir un poco de caldo de los mejillones que tenemos reservado. Ya tendremos una bechamel y podemos añadir los mejillones y las gambas, remover durante unos minutos más para que la harina no nos quede cruda. Rectificar de sal si es necesario y añadir la ½ cayena molida si queremos el plato con punto picante. Añadir una ver terminado un poquito de nuez moscada en polvo.
Rellenar los mejillones y dejar enfriar al menos una hora para que tengan consistencia.
Rebozar los mejillones tigre con huevo batido y luego por pan rallado.
Freír en sartén con una buena cantidad de aceite de oliva y escurrir en papel de cocina.
¡Buen provecho! Ya veréis como repetiréis.