Estrenamos una nueva sección en nuestra web, dedicada a los mercados, ya que en nuestros viajes a diferentes ciudades no debemos dejar de incluir una visita a alguno de ellos. Los mercados nos mostraran una parte importante de cualquier país, la gastronomía y nos indicaran como es la vida de la ciudad y de sus habitantes.
Este año las vacaciones nos han llevado a Croacia y hemos podido visitar el mercado de Dolac.
Dolac es el mercado más grande de Zagreb, capital de Croacia. Está situado en una plaza, en la céntrica zona de Kaptol. En un paseo por el centro y recorriendo un entramado de pequeñas calles, llegaremos a la plaza desde donde podemos ver las agujas de la catedral de la Asunción de la Virgen Maria y también la torre del bonito tejado de la iglesia de Santa Caterina de Zagreb. Así que no se trata de un mercado ubicado en un barrio lejano y lo podemos visitar junto el resto de plazas y momumentos del centro.
En este mercado encontraremos de todo para poder abastecer nuestra cocina: en el piso de arriba y al descubierto, pero bajo unas coloridas sombrillas rojas, podremos comprar frutas, verduras, hortalizas, miel y la famosa lavanda croata. En un extremo del mercado se agrupan los vendedores de quesos frescos: de estos nos llamó la atención que eras casi todo señoras y suponemos que los deben hacer ellas de modo artesanal.
No os marchéis del mercado sin visitar la sala cubierta donde se vende exclusivamente el pescado del día. Se ubica en uno de los lados del piso superior del mercado, el que está al aire libre y aunque no encontrareis ni grandes paradas de marisco, ni pescados extraños, vale la pena entrar y completar la visita.
Justo debajo de todo el trasiego, en el piso inferior, se ubican las paradas de carne, embutidos y panaderías, entre otros.
El mercado de Dolac está abierto todos los días, desde primera hora de la mañana hasta el mediodía.
Una de las cosas que resulta encantadoras es que se trata de un mercado donde compran los croatas, y aunque podemos encontrarnos con muchos turistas, especialmente en los meses de verano, todavía conserva el encanto del mercado tradicional y nos podemos mezclar con la gente haciendo sus compras.
Ya en el nivel más bajo, nos despedimos del mercado de Dolac con el olor de las flores y ramos expuestos en sus últimas paradas y nos adentramos en la plaza de Ban Jelacic, centro neurálgico de Zabreb, y lugar ideal para tomar un café en una de las terrazas y dedicar unos minutos a ver la gente pasar.
La visita del mercado y de los alrededores nos traerá mucho tiempo buenos recuerdos. Os dejamos unas fotos y no olvidéis los mercados cuando visitéis ciudades diferentes a las vuestras.
Si conocéis un mercado que os traiga buenos recuerdos, que venda un producto especial, que sea colorido, o que os ha llamado la atención por algún motivo, mandarnos un comentario diciendo el nombre del mercado y la ciudad donde está.